6 febrero, 2012
La semana pasada, el Comité de Empresa Europeo de Rio Tinto denunció a esa empresa internacional productora de minerales y metales por el injustificado cierre patronal que impuso contra 780 sindicalistas canadienses del Syndicat des Métallos d’Alma, organización afiliada a los United Steelworkers (USW) en Alma, Québec.
Esta intervención de Véronique Roche, Secretaria del Comité de Empresa Europeo de Rio Tinto en París, se produjo en momentos en que el USW, junto con la ICEM y la Federación Internacional de Trabajadores de las Industrias Metalúrgicas (FITIM) intensificaban su campaña al respecto. Se han lanzado iniciativas para llamar la atención y presionar a la multinacional, con el fin de apoyar a los trabajadores de la fundición de aluminio Alcan, filial de Rio Tinto, quienes fueron víctimas de un injusto cierre patronal que comenzó el 1° de enero en la región de Saguenay-lac-Saint-Jean de Québec.
El 31 de marzo, se va a realizar una protesta masiva de sindicalistas canadienses e internacionales en Alma, que está a unos 380 kilómetros al norte de la sede de Alcan en Montreal. Dicha manifestación se va a lleva a cabo un día después de la reunión del Comité de la Región Norteamericana de la ICEM, que se realizará como demostración de su apoyo a los perseguidos trabajadores del Syndicat des Métallos d’Alma, del Local 9490 del USW.
photo: lapresse.ca
Hace 11 días atrás, al comenzar la campaña internacional de las afiliadas de la ICEM y de la FITIM, con cartas de protesta que se enviaron a Tom Albanese, Presidente y Director General de Rio Tinto, la respuesta que dio la empresa, apenas un día después de haber comenzado la campaña, fue apagar sus máquinas de fax para evitar la inundación de cartas escritas de protesta que le llegaban.
Sin embargo, es seguro que será efectiva la intervención del Comité de Empresa Europeo. Roche señaló que el Comité de Empresa ha calificado como “una posición destructiva y socialmente irresponsable” el hecho de que la administración de Rio Tinto Alcan ni siquiera haya estudiado las propuestas del sindicato.
En la carta del 2 de febrero, dirigida a Albanese, se señalaba además "Le informamos que nuestro foro europeo apoyará a los United Steelworkers en todas las actividades que se organicen en Europa y en otras partes, y que vamos a participar en las acciones que el USW considere necesarias para combatir este ataque antisocial".
El Comité de Empresa Europeo exigió que Rio Tinto ponga fin al cierre y que insista que la administración local regrese a la mesa de negociaciones para lograr, con los trabajadores, un convenio colectivo justo, equitativo y aceptable que no diezme el bienestar económico de la comunidad. (La carta completa puede leerse aquí.)
El problema principal que motivó el cierre es el deseo de Rio Tinto Alcan de contar con derechos de tercerización sin límite, lo cual al final reduciría a la mitad los ingresos por concepto de sueldos en la región de Saguenay-Lac-Saint-Jean. Desde que Rio Tinto adquiriera Alcan en 2007 por US$39 billones, la administración de Alma ha venido reemplazando a cada trabajador que jubila, o en caso de otras reducciones de la fuerza de trabajo, aplicando la tercerización a subcontratistas que emplean a personal con bajos sueldos, y sin prestaciones sociales completas.
En las negociaciones colectivas, el Sindicat des Métallos d'Alma ha intentado establecer una planta de empleados directos a tiempo completo. Alcan se negó a hacerlo, e inmediatamente, al vencer el convenio colectivo anterior de cinco años, impuso un cierre patronal contra la fuerza de trabajo de esa planta. Hay pruebas cada vez mayores de que Rio Tinto Alcan está realizando parcialmente sus operaciones en la planta, que produce 438.000 toneladas del metal, recurriendo a trabajadores rompehuelgas durante el cierre patronal, lo cual está prohibido según los estatutos laborales de la provincia de Québec. El USW aborda este asunto en los tribunales.