10 mayo, 2011La FITIM se une a la petición del Sindicato de Mineros mexicano de mejor salud y seguridad en las minas en México y de que se sancione a las compañías y a las autoridades gubernamentales, tras la muerte de 14 personas en la explosión de una mina de carbón en México, el 3 de mayo.
MEXICO: El 8 de mayo se confirmó la muerte de 14 mineros, después de recuperar sus cuerpos de una mina de carbón en Sabinas (México), como consecuencia de una explosión el 3 de mayo. Un muchacho de 15 años, que trabajaba en la boca de la mina, también perdió un brazo y fue hospitalizado con otras heridas.
"La muerte de estos 14 mineros pone de manifiesto una vez más los terrible peligros que afrontan los mineros en México y la urgente necesidad de una mejor reglamentación y provision de seguridad en las minas", dijo el secretario general de la FITIM, Jyrki Raina.
La mina, que se explotaba sin autorización y funcionaba desde hacía 20 días, con una profundidad de aproximadamente 50 metros, se conoce como un "potico". Estas pequeñas minas informales son cavadas por hombres y adolescentes que pueden extraer hasta 30 toneladas de carbón al día.
La mina de las Sabinas se encuentra en el estado de Coahuila, el mismo en que se produjo una explosión en la mina de carbón de Pasta de Conchos en 2006, en la que murieron 65 mineros, la mayoría de sus cuerpos han quedardo atrapados hasta la fecha, en el peor desastre minero de los últimos tiempos en México.
El sindicato mexicano afiliado a la FITIM Los Mineros publicó una declaración en la que decía que, con independencia del tipo de mina, los trabajadores "merecen trabajar en condiciones debidamente seguras y con suficientes protecciones de la salud en el lugar". El sindicato pide que las compañías que no apliquen medidas de salud y seguridad adecuadas sean sancionadas por negligencia criminal, al igual que las autoridades estatales o federales por no cumplir su responsabilidad de proteger la vida y la salud de los trabajadores mexicanos.
Los Mineros, con el apoyo de la FITIM, ha seguido pidiendo una investigación sobre el desastre de Pasta de Conchos. Las familias de los hombres que murieron luchan desde hace años por recuperar sus restos, en tanto que Los Mineros y la comunidad sindical internacional han exigido justicia. El presidente de Los Mineros, Napoleón Gómez, ha calificado el desastre de "homicidio industrial".
"Está demostrado que el Gobierno mexicano no regula debidamente la industria minera en México, y los trabajadores mexicanos pagan con excesiva frecuencia el ultimo precio: su vida", dijo Raina.
"La muerte de estos 14 mineros pone de manifiesto una vez más los terrible peligros que afrontan los mineros en México y la urgente necesidad de una mejor reglamentación y provision de seguridad en las minas", dijo el secretario general de la FITIM, Jyrki Raina.
La mina, que se explotaba sin autorización y funcionaba desde hacía 20 días, con una profundidad de aproximadamente 50 metros, se conoce como un "potico". Estas pequeñas minas informales son cavadas por hombres y adolescentes que pueden extraer hasta 30 toneladas de carbón al día.
La mina de las Sabinas se encuentra en el estado de Coahuila, el mismo en que se produjo una explosión en la mina de carbón de Pasta de Conchos en 2006, en la que murieron 65 mineros, la mayoría de sus cuerpos han quedardo atrapados hasta la fecha, en el peor desastre minero de los últimos tiempos en México.
El sindicato mexicano afiliado a la FITIM Los Mineros publicó una declaración en la que decía que, con independencia del tipo de mina, los trabajadores "merecen trabajar en condiciones debidamente seguras y con suficientes protecciones de la salud en el lugar". El sindicato pide que las compañías que no apliquen medidas de salud y seguridad adecuadas sean sancionadas por negligencia criminal, al igual que las autoridades estatales o federales por no cumplir su responsabilidad de proteger la vida y la salud de los trabajadores mexicanos.
Los Mineros, con el apoyo de la FITIM, ha seguido pidiendo una investigación sobre el desastre de Pasta de Conchos. Las familias de los hombres que murieron luchan desde hace años por recuperar sus restos, en tanto que Los Mineros y la comunidad sindical internacional han exigido justicia. El presidente de Los Mineros, Napoleón Gómez, ha calificado el desastre de "homicidio industrial".
"Está demostrado que el Gobierno mexicano no regula debidamente la industria minera en México, y los trabajadores mexicanos pagan con excesiva frecuencia el ultimo precio: su vida", dijo Raina.