29 noviembre, 2012La IndustriALL desempeña una función fundamental en el grupo de presión sindical en la COP18 (18ª Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático) en Doha (Qatar), del 26 de noviembre al 7 de diciembre.
El país anfitrión, Qatar, tiene un historial de horrible prácticas en lo concerniente a los trabajadores migrantes y los derechos sindicales. Los sindicatos son ilegales y la mayoría de la labor que se realiza en el país corre a cargo de trabajadores migrantes precarios, sin derechos y con poco respeto.
La COP15, en Copenhague, concluyó sin compromisos sobre acciones futuras ni financiación. En la COP16, en Cancún, hubo algunos progresos, y en la COP17, en Durban, al menos se reanudó el proceso y se refirmó la credibilidad del proceso de la CMNUCC. Sin embargo, ahora estamos al final del período de compromisos inicial del Protocolo de Kioto, y el riesgo es que los compromisos existentes en el PK podrían perderse sin tener nada para reemplazarlos. Con fechas distintas propuestas para un segundo período de compromisos del Protocolo de Kioto, y 2020 como fecha de partida de la Plataforma de Durban (sea cual fuere lo que pueda llegar a contener) nos dirigimos hacia un futuro fragmentado.
La mayor parte de la tensión en la COP18 probablemente gire en torno a cuestiones como la fecha final efectiva del Protocolo de Kioto y el devenir de decisiones anteriores adoptadas en el GTE-CLP. Las cuestiones financieras, de condicionalidad y verificación de los compromisos también serán motivo de tensión. Se considera poco probable que la COP18 pueda tomar importantes decisiones sobre dinero o fuentes de financiación.
Hablando en la apertura de la plenaria del Grupo de Trabajo Especial sobre Cooperación a Largo Plazo en el marco de la Convención (GTE-CLP) en Doha (Qatar), el martes 27 de noviembre de 2012, el director de Salud, Seguridad y Sostenibilidad de la IndustriALL, Brian Kohler, en nombre del movimiento sindical internacional, declaró:
Apoyamos las discusiones en torno a un segundo período de compromisos del Protocolo de Kioto. Consideramos importante que la CLP asegure en su mandato final que las instituciones y la estructura legal creadas en el Convención y en el Protocolo hasta ahora se preserven … Pido a las Partes que garanticen que las decisiones anteriores sobre la CLP, incluidas las relativas a la Transición justa, no se pierdan cuando las Partes reorienten su labor hacia la Plataforma de Durban.
Acaba de establecerse la gobernanza sobre el Fondo para el Clima. Está dominada por bancos centrales, que no desean permitir la participación de sindicatos ni de ONG. No sienten la responsabilidad política de conceder a los sindicatos espacio, lo cual es una importante deficiencia democrática. A menos que los sindicatos sean capaces de instituir la gobernanza correcta, expresarán preocupación e insistirán en algún control democrático. Los sindicatos no podrán contemplar ni influir en decisiones para financiar, por ejemplo, iniciativas privadas, instrumentos, proyectos que no respeten las normas laborales y sociales, y corre el riesgo de convertirse en un fondo de corrupción de 100.000 millones de dólares.
En cuanto a las fuentes de financiación, la tasa sobre las transacciones financieras se pasa por alto, mientras que los banqueros centrales parecen favorables a un impuesto sobre el carbono.