4 abril, 2012
El sábado 31 de marzo, se reunieron en Alma. Québec, más de 8.000 sindicalistas y simpatizantes en una manifestación de apoyo a los trabajadores afiliados al Syndicat des Métallosd’Alma Local 9490, organización afiliada al United Steelworkers (USW), víctimas de un cierre patronal. Desde hace ya 14 semanas, unos 780 trabajadores de una fundición de aluminio de Rio Tinto en Alcan han sido objeto de un implacable cierre patronal, privándoles de su medio de ganarse la vida, quedando en evidencia para todo el mundo el dominio económico completo que tiene Rio Tinto en la región de Saguenay-lac-Saint-Jean de Quebec.
Se dirigieron a Alma, una comunidad de 30.000 habitantes, autobuses repletos de militantes sindicales de todo Québec, en manifestación de solidaridad con los trabajadores siderúrgicos de Alma, víctimas del cierre patronal. El USW también organizó para que asistieran convoyes y autobuses de otras partes de Canadá, incluyendo Toronto, Hamilton y otras ciudades industriales de la provincia de Ontario.
También asistieron unos 50 sindicalistas internacionales, en representación de los trabajadores empleados en Rio Tinto o Alcan en Australia, Francia, México, los Países Bajos, Nueva Zelandia, Sudáfrica, el Reino Unido, EE.UU. y otros países. Un día antes de la manifestación, la ICEM celebró en Alma la reunión bianual para la región norteamericana de la federación, como señal para los 780 trabajadores de Alma que cuentan con la solidaridad internacional en su lucha por equidad en el trabajo.
Manfred Warda y Jyrki Raina se dirigen a los manifestantes
Este exitoso acto comenzó con discursos que fueron pronunciados en un centro comercial de Alma, antes de que una marcha, que venía tocando música de la clase trabajadora, se dirigiera por las calles de la ciudad hasta llegar a un anfiteatro. Allí, los dirigentes políticos y sindicales siguieron criticando a la segunda compañía del mundo en términos de la magnitud de sus recursos, por la devastación económica que producía para los trabajadores en el centro de Quebec.
En esta ocasión, Manfred Warda, Secretario General de la ICEM, se comprometió a hacer que el movimiento sindical internacional movilizara a los trabajadores de Río Tinto en todo el mundo en torno a esta lucha.
“Si aquí en Québec no se logra detener esta despiadada agenda social de Rio Tinto, habrá pocas esperanzas de que se pueda detener en otros lugares cuando otros trabajadores enfrenten ataques patronales de esta naturaleza", dijo Warda. Tenga la seguridad, agregó, que "daremos a conocer en todo el mundo las ofensas que Rio Tinto Alcan ha cometido aquí, hasta que esta empresa se comprometa a dejar de atacar a su comunidad y su sindicato."
Jyrki Raina, Secretario General de la Federación Internacional de Trabajadores de las Industrias Metalúrgicas (FITIM), señaló al respecto: "Si Rio Tinto quiere prosperar, no debe romper el delicado equilibrio que conecta la empresa con la comunidad".
Ken Neumann, Vicepresidente de la ICEM y Director Nacional del USW en Canadá, se refirió al gobierno conservador de Stephen Harper, en su país, donde el gobierno federal no ha prestado atención a varios ataques de las multinacionales contra los trabajadores canadienses.
"Es evidente que Stephen Harper falló al no imponer condiciones a la venta de Alcan a Rio Tinto en 2007, y al no tomar medidas para proteger los puestos de trabajo", dijo Neumann. "Siendo una persona con tanto interés en participar en las relaciones laborales, ¿por qué no interviene con Rio Tinto para poner fin a este abominable cierre patronal?"
El cierre patronal en cuestión fue consecuencia de los legítimos reclamos del Local 9490 por la progresiva eliminación de puestos de trabajo permanentes con sueldo de C$34 por hora, contra el plan de trabajo de la empresa Alcan, que sustituye esos puestos de trabajo, usando mano de obra tercerizada, pagando la mitad de esa cantidad.
Mineros de Turquía manifestaron su solidaridad con los trabajadores siderúrgicos víctimas del cierre patronal
Al caer la tarde del sábado, alrededor de una hora después de los discursos finales en el Parc le Festiv Alma, Rio Tinto Alcan publicó un comunicado defensivo, en el que criticaba el evento del USW, diciendo que era necesario tener un "ambiente más tranquilo", para poder continuar las negociaciones.
Sin embargo, durante casi tres meses, hasta el 19 de marzo, cuando aumentó la presión pública en Québec, principalmente porque Alcan aprovechaba el cierre patronal para revender a la provincia la energía hidroeléctrica sobrante, la empresa se negó a participar en las negociaciones, prefiriendo realizar operaciones de producción reducida en la moderna y económica planta de fundición de Alma, mientras esperaba para que aumentaran los precios del aluminio a nivel mundial (Véase el informe de la ICEM del 21 de marzo.)
Durante dos días de marzo, con la ayuda de mediadores provinciales, el Syndicat des Métallos Local 9490 y Alcan volvieron entablar conversaciones, y hubo negociaciones durante dos días más, del 28 al 29 de marzo. Es muy probable que las dos partes se reúnan de nuevo esta semana.
Sin embargo, desde que la empresa suspendiera las negociaciones antes de que éstas hubieran terminado, imponiendo el cierre patronal el 30 de diciembre, sin antes siquiera haberse planteado la mayoría de los problemas en el lugar de trabajo, Rio Tinto se ha conformado con robar de la región Saguenay-lac-Saint-Jean C$1,8 millones por semana por concepto de sueldos y prestaciones perdidos.
Con o sin una resolución para poner fin al cierre patronal en Alma, la manifestación del 31 de marzo constituirá el preludio de una lucha mundial contra Río Tinto para resistir su política antisocial que ha llegado a ser característica de la empresa en todos partes donde hace negocios.