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Decisivo Acuerdo con H&M resuelve conflictos

7 enero, 2016Apenas dos meses después de haber entrado en vigor, un Acuerdo Marco Global establecido entre IndustriALL Global Union y H&M, compañía sueca de prendas de vestir, ha permitido acelerar la reintegración de trabajadores despedidos en fábricas de confección, tanto en Myanmar como en Pakistán.

Este Acuerdo Marco Global, que fuera firmado en noviembre de 2015, sirve para salvaguardar los derechos laborales de los 1,6 millones de trabajadores y trabajadoras que laboran en la cadena de suministro mundial de H&M.

En Myanmar, este Acuerdo fue herramienta clave de conciliación para que los sindicalistas pudieran volver al trabajo, y también para lograr reconocimiento del sindicato en la fábrica Jiale Fashion en Yangon.

En octubre de 2015, ocho dirigentes sindicales fueron despedidos de esa fábrica de confección, dando lugar a una huelga de un mes. La Confederación de Sindicatos de Myanmar (CTUM) informó sobre el conflicto a la oficina regional de IndustriALL para Asia Sudoriental, que, ante las oficinas de H&M Sustainability en Yangon y Suecia, recurrió al Acuerdo Marco en cuestión, sobre todo porque el conflicto planteaba cuestiones sobre la libertad de sindicación.

Luego, H&M Sustainability presionó para establecer un diálogo, tanto a través de su oficina local en Yangon como ante los propietarios de Jiale Fashion en Hong Kong. H&M Sustainability, IndustriALL y CTUM participaron en todo el proceso hasta llegar a un acuerdo entre los trabajadores y la fábrica.

A consecuencia de estas diligencias, además de reintegrar a los trabajadores despedidos, la fábrica acordó reconocer el sindicato, la Organización Laboral Básica de Jiale, que está afiliada a CTUM y a IndustriALL a través de la Federación de Trabajadores Industriales de Myanmar (IWFM).

Khaing Zar, Secretario General Adjunto de IWFM, señaló:

“Clave para la paz laboral es desarrollar confianza entre los trabajadores y la administración de la empresa. La formación del Comité de Coordinación de los Trabajadores en la fábrica mejorará la cooperación en el lugar de trabajo y, por supuesto, el mayor logro ha sido el reconocimiento del sindicato en Jiale Fashion”.

Por su parte, Christina Hajagos-Clausen, Directora del sector textil de IndustriALL, afirmó:

“El Acuerdo Marco Global se basa en la convicción de todas las partes de que relaciones de trabajo bien estructuradas son esenciales para un modelo de producción estable y sostenible. Este tipo de colaboración es crucial para lograr mejoras duraderas para los trabajadores y trabajadoras de la confección en la cadena de suministro de H&M”.

Por otra parte, en noviembre de 2015, 88 trabajadores y trabajadoras de la fábrica Denim Clothing Company (DCC) en Pakistán fueron despedidos por reclamar sus derechos. El conflicto comenzó cuando cinco representantes de los trabajadores fueron despedidos sumariamente por pedir un diálogo sobre temas tales como la falta de seguridad social, seguro, y los salarios por debajo del estándar mínimo, que a menudo se pagan atrasados. Cuando 83 colegas se unieron para defender a sus compañeros, también perdieron sus puestos de trabajo.

Como parte del Acuerdo Marco Global recién firmado con H&M, las dos partes trabajaron para lograr la reintegración de los 88 trabajadores y trabajadoras por medio de negociaciones conjuntas con NTUF, organización paquistaní afiliada a IndustriALL, y la administración local de la empresa en Denim Clothing. Todos los trabajadores fueron reintegrados con sueldo completo a partir del 26 de noviembre, fecha en que fueron despedidos.

Nasir Mansoor, Secretario General Adjunto de NTUF, dice que los problemas se resolvieron rápidamente gracias al Acuerdo Marco Global y el trabajo realizado por la oficina regional de IndustriALL:

“Cuando se trata de una marca proactiva, los Acuerdos Marcos Globales son una herramienta eficaz para resolver conflictos y un estupendo instrumento para proteger los derechos de los trabajadores”.

Abdul Jabbar, uno de los trabajadores afectados, concluyó diciendo:

“Esto nos demuestra el poder de los trabajadores unidos y de la fuerza de la solidaridad internacional para resolver las crisis. No sólo nos infundió mucho coraje, sino también transmitió firmeza a los demás trabajadores y trabajadoras de la fábrica, y a los trabajadores de otras fábricas de la zona”.