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Pacific Rubiales: Indignación por fraude de sindicato amarillo

7 noviembre, 2011

Sigue empeorando la conducta de la empresa canadiense de energía Pacific Rubiales en sus ataques ilegales contra la Unión Sindical Obrera (USO), sindicato afiliado a la ICEM, en los campos petrolíferos de la región de Meta de Colombia. El 27 de octubre, la ICEM informó que la empresa había firmado un acuerdo con UTEN, sindicato de la administración de la empresa, sobre el plazo para llegar a un acuerdo con la USO.

En estos momentos, mientras los activistas de la USO siguen realizando manifestaciones masivas, la empresa organiza reuniones de su sindicato amarillo, con protección armada, incluso desde un helicóptero de la empresa. Al mismo tiempo, la compañía está financiando campañas propagandísticas que informan de manera exagerada sobre las pequeñas reuniones que se realizan.

Ahora se han conocido evidencias de la siniestra alianza entre la empresa y el alcalde local de Puerto Gaitán, Edgar Humberto Silva, que indican que se había registrado el voto de personas fallecidas a favor del candidato de la empresa en las elecciones del alcalde, y que se acosó e intimidó a las comunidades indígenas locales para que votaran por Humberto Silva.

Entonces no es de extrañarse que Humberto Silva haya hecho todo lo que podía para permitir que la empresa canadiense siguiera explotando los ricos recursos de la región, y a los pobres trabajadores. Habitantes de la comunidad local se han tomado la escuela donde se realizó la votación, y exigen que se vuelvan a realizar las elecciones. El sindicato empresarial UTEN organizó una marcha de celebración después de la elección de Humberto Silva, el 2 de noviembre.

La empresa petrolera del estado Ecopetrol está ligada a Pacific Rubiales y otras multinacionales activas en esa región, participando en la creación del sindicato amarillo y usando varias estrategias para derrotar a la USO. Ecopetrol ejerce su influencia y fuerza económica, organizando decenas de demandas contra dirigentes de la USO, en tanto no escucha los fallos de los tribunales que favorecen a los huelguistas. Ecopetrol también usa sus filiales Comai y Propilco, que son 100% propiedad de la empresa, para presentar demandas contra activistas sindicales.

No se ha recibido ninguna respuesta a la carta del 28 de octubre que enviaran en forma conjunta los Secretarios Generales de la ICEM, de la Federación Internacional de Trabajadores de las Industrias Metalúrgicas (FITIM) y el Sindicato de Trabajadores de Comunicaciones, Energía y Papel (CEP) de Canadá, dirigida a los Copresidentes y Directores Ejecutivos de Pacific Rubiales, Serafino Iacono, y Miguel de la Campa. 

En dicha carta, las tres organizaciones sindicales denuncian la decisión que tomara la empresa de engañar a la USO durante las negociaciones, y, posteriormente, de firmar un convenio con UTEN para dejar afuera la organización que legítimamente participaba en las negociaciones. La USO representa a más de 14.000 trabajadores petroleros que actualmente laboran en los campos petrolíferos de Rubiales y Quifa, mientras de la UTEN responde solamente al personal administrativo.

El día de la firma del falso convenio, Pacific Rubiales despidió a 500 trabajadores, y luego pasó a intimidar a los demás trabajadores, amenazándoles con despido por seguir siendo miembros de la USO por negarse a cambiar su afiliación para ser miembros de la UTEN.

Hay que mencionar aquí que el gobierno de Colombia ha permitido que, con estas tácticas recientes, Pacific Rubiales viole todas las normas mínimas internacionalmente reconocidas sobre derechos de los trabajadores. Especialmente decepcionante fue la eliminación del arbitraje del Ministerio del Trabajo que establecía un plazo para iniciar un convenio entre la USO y Pacific Rubiales. Ese plazo venció el 21 de octubre, el mismo día que Pacific Rubiales firmara el falso acuerdo con el sindicato amarillo.

La ICEM apoya plenamente la campaña de la USO y su Asamblea Permanente establecida el 24 de octubre, y la lista original de reivindicaciones que incluye contratación directa, aumentos salariales, vivienda decente y alimentación adecuada, servicios de salud, transporte, e inversión social en las comunidades.

El CEP facilitará para que los dirigentes de la USO viajen a Canadá, con el fin de reunirse con la administración de la empresa a principios de diciembre.