19 noviembre, 2000LIMA.- Fujimori renunció a la Presidencia del Perú, "luego de evaluar la nueva correlación de fuerzas en el Congreso", según un escueto comunicado de prensa dado a conocer ayer en Tokio, ciudad donde permanece el Mandatario desde el jueves pasado.

En la información se consigna que la decisión fue tomada ayer y que Fujimori no hará ninguna declaración más, hasta entregar su carta de renuncia al nuevo Presidente del Congreso, el opositor Valentín Paniagua.
La noticia fue anunciada en Lima por el Primer Ministro, Federico Salas, y provocó una nueva convulsión en la aguda crisis política que atraviesa Perú.
"El no quiere, en forma alguna, entorpecer el proceso de democratización y que las próximas elecciones puedan ser totalmente cristalinas", dijo Salas.
El segundo Vicepresidente de la República, Ricardo Márquez, dijo que "si el Congreso lo acepta, yo asumiré la Presidencia".
El Presidente interino confirmó la dimisión del gabinete, ratificó el cronograma electoral y anunció que "haremos un gabinete de consenso, cuando se retiren algunos ministros".
Se sabe que el 7 de diciembre es una fecha clave para que se retiren de sus cargos en la administración pública todos aquellos que deseen participar del proceso electoral y los comicios de abril del próximo año.
Los parlamentarios de la oposición peruana acordaron pedir la renuncia de Ricardo Márquez a la Presidencia interina, favoreciendo así que la jefatura de Estado sea asumida por el Presidente del Congreso, Valentín Paniagua.
La continuidad del Presidente interino ha sido cuestionada por la oposición, que mantiene que éste fue parte del presunto fraude que se realizó para que Fujimori fuera reelegido por tercera vez consecutiva el pasado 28 de mayo.
Por su parte, los parlamentarios oficialistas declararon su apoyo a Ricardo Márquez para que reemplace al dimitido Alberto Fujimori.
Márquez afirmó anoche que no dimitirá porque eso sería "admitir" que ha estado "involucrado en actos de corrupción".
La incertidumbre acerca de quién sucederá a Fujimori en el mando y si se instalará un gobierno de transición, se mezcló ayer con las críticas a la forma en que Fujimori dio a conocer su dimisión: desde el extranjero, sin dar la cara y sin mayores explicaciones.
Esto provocó la renuncia irrevocable de los ministros del gabinete, quienes emitieron un comunicado manifestando su "indignación por tan sorpresivo hecho, en un contexto de grave crisis e incertidumbre respecto del retorno de Fujimori". El propio Ricardo Márquez dijo no estar de acuerdo con la manera en que se condujo el Mandatario, y le exhortó a regresar de Japón y a cumplir con "el deber moral" de "responder ante el pueblo peruano".
Los ministros confirmaron su disposición de seguir en sus cargos "hasta que se produzca la transición a un nuevo gobierno".
Crisis de Estado Los llamados a conservar la calma y a asumir con responsabilidad las horas cruciales que se viven provinieron ayer de todos los sectores políticos y sociales.
"Tenemos una obligación moral y política de asegurarle a nuestro pueblo una salida que, siendo constitucional sea, al mismo tiempo, identificada con las aspiraciones democráticas que animan a todos los sectores de la nación", dijo el Presidente del Congreso, Valentín Paniagua.
Consultado acerca de la validez de la renuncia de Fujimori, Paniagua explicó que debe formalizarse a través de un documento en el que éste exponga las razones que lo llevaron a tomar tal decisión.
"El Congreso deberá ponderar las razones de la renuncia y ver si éstas proceden", dijo Paniagua, sin referirse a si existe la posibilidad de que el Parlamento no acepte la renuncia de Fujimori, sino que decida decretar la vacancia de la Presidencia de la República por incapacidad moral del Mandatario, tema que se venía sugiriendo con insistencia en las últimas semanas y que es una gestión que le compete exclusivamente al Poder Legislativo.
Con respecto al supuesto vacío de poder que provoca la inminente renuncia del Mandatario y la dimisión no aceptada formalmente del primer Vicepresidente de la República, Francisco Tudela, Paniagua dijo que ha de prevalecer la línea de sucesión constitucional.
"Al producirse esta renuncia, se halla el segundo Vicepresidente en el ejercicio de la Presidencia, por lo tanto no hay un vacío de poder, desde el punto de vista legal", dijo Paniagua.
El Defensor del Pueblo, Jorge Santistevan de Noriega, sostuvo, en cambio, que la renuncia de Tudela nunca fue tramitada por el Congreso, de modo que podría ser él quien sea designado para asumir.
"Va a haber una lucha muy fuerte por el poder por parte de toda la clase política", vaticinó ayer la congresista oficialista Carmen Lozada, quien consideró que "esto es lo mejor que puede hacer el Presidente ante la posibilidad de que la oposición quiera decretar la vacancia de la Presidencia".
Los analistas consideraron que, si bien es cierto que la renuncia del Jefe de Estado constituye una crisis de Estado, las recientemente promulgadas reformas a la ley electoral y la convocatoria a nuevas elecciones presentan un panorama claro al que ha de ceñirse cualquiera que asuma la Presidencia en proceso de transición.
Fujimori en Tokio Alberto Fujimori salió intempestivamente el lunes de Perú con destino a Brunei, donde se realizó la cumbre presidencial de países miembros de la APEC (Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico), que se realizó el miércoles y el jueves de la semana pasada.
El mismo día de su salida, en el Parlamento fue destituida la Presidenta del Congreso, Martha Hildebrandt, con lo que el oficialismo perdió el control ininterrumpido que había tenido sobre el Legislativo durante diez años.
Después de Brunei, el Presidente debía dirigirse a Panamá, para asistir el viernes y sábado a la X Cumbre Iberoamericana. Pero ya la noche del miércoles, Fujimori salió de Brunei con destino desconocido. Finalmente el jueves por la mañana se confirmó que estaba en Tokio.
Desde entonces, otra serie de rumores confundió a la opinión pública: que Fujimori iba a pedir asilo político en Malasia; que había ido a Japón a visitar a su hijo; que estaba negociando un préstamo en Tokio para equilibrar la Caja Fiscal; que estaba enfermo y no podía viajar. Hasta que finalmente ayer, se supo oficialmente que renunciaba a la Presidencia de la República.
El Presidente interino Márquez dijo ayer que había prolongado su estadía hasta el miércoles 22, pero que no sabía con certeza si regresaría entonces.
En Tokio se informó que el Presidente Alberto Fujimori no ha solicitado asilo en Japón.
Funcionarios de la cancillería, hablando a condición de anonimato, negaron rumores de que Fujimori había solicitado asilo.
Entretanto, un funcionario del Ministerio de Justicia, Kazujiro Nakamura, negó versiones de que el Mandatario peruano es ciudadano japonés, y añadió que Japón y Perú no tienen un tratado de extradición.
La Cancillería se negó a revelar por cuánto tiempo Fujimori se va a quedar en Japón, aunque dijo que la visa del Presidente peruano es por un año.
En Lima ayer campeaban las especulaciones referidas a que Fujimori no regresaría a su país ante el temor de enfrentar denuncias de complicidad con Vladimiro Montesinos, su ex asesor de inteligencia y protagonista del mayor escándalo de corrupción en Perú.
Por su parte, el líder opositor, Alejandro Toledo, declaró anoche desde España a la cadena televisiva CNN que Fujimori ha solicitado a las autoridades japonesas un pasaporte de ese país.
Múltiples Reacciones En tanto, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas peruanas expresó ayer mediante un comunicado su "absoluta" subordinación al orden constitucional al conocer la dimisión de Fujimori.
"Las FF.AA. en cumplimiento a nuestro ordenamiento legal y subordinación al poder constitucional reitera su absoluto respeto a las decisiones que adoptarían las autoridades legítimamente constituidas en el marco de lo prescrito en la Constitución Política del Perú", señaló el escueto comunicado.
El ex candidato presidencial Alejandro Toledo dijo que la renuncia de Fujimori "es un triunfo de todos los que exigieron su salida". Toledo se mostró tranquilo de que exista un cronograma electoral establecido, y anunció su retorno desde Europa a Lima para hoy por la tarde.
El congresista oficialista, Absalón Vásquez, expresó su consternación por la renuncia del Presidente Fujimori y destacó la actitud del Mandatario que "es a fin de no generar más enfrentamientos propiciados por la oposición política".
Agregó que ayer se comunicó por teléfono con Fujimori, quien le dijo que ha decidido presentar su renuncia "por el bien del país".
El líder del Frente Independiente Moralizador (FIM), Fernando Olivera, consideró como una "gran noticia" para todos los peruanos la renuncia del Mandatario luego de 65 días de presentado el video de la corrupción en el que se observa al ex asesor del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN), Vladimiro Montesinos, entregando dinero al congresista Alberto Kouri.
"Para nosotros la renuncia de Fujimori en esta circunstancia no hace sino confirmar su responsabilidad dentro de lo que ha sido un manejo mafioso en el Perú en los últimos 10 años", señaló Olivera.
Desde Washington la portavoz de la Casa Blanca, Mary Ellen Countryman, indicó que EE.UU. trabajará con la Organización de Estados Americanos (OEA) para lograr una transición pacífica en Perú.
"Lo importante para Perú es que la transición en las elecciones del 8 de abril próximo se lleve a cabo de una forma fácil y pacífica", señaló la portavoz.
En junio pasado, la Asamblea General de la OEA envió una misión a Perú para colaborar en el restablecimiento de la democracia en ese país, encabezada por el secretario general de esa entidad regional, César Gaviria.
El propio Gaviria pidió ayer al pueblo peruano mantener la calma, permanecer vigilante y manifestar su respaldo a las instituciones democráticas y al orden constitucional.
Manifestaciones Populares La noticia de la renuncia del Mandatario peruano dio pie a que varios grupos de manifestantes salieran a las calles en varias ciudades del país para festejar y lanzar lemas contra el gobierno.
En Lima, unos cien trabajadores de la empresa Telefónica del Perú se reunieron en la Plaza Mayor de Lima para festejar la renuncia de Fujimori.
"Y ya cayó, y ya cayó, la dictadura ya cayó", cantaban los trabajadores que pedían la cárcel para los "siameses": el Presidente Fujimori y su ex asesor Vladimiro Montesinos.
En las plazas principales de las ciudades sureñas de Arequipa, Cusco y Tacna, en la norteña Cajamarca y en la de Iquitos (selva) grupos de pobladores manifestaron su alegría por la decisión del presidente Fujimori de retirarse del cargo.
La noticia fue anunciada en Lima por el Primer Ministro, Federico Salas, y provocó una nueva convulsión en la aguda crisis política que atraviesa Perú.
"El no quiere, en forma alguna, entorpecer el proceso de democratización y que las próximas elecciones puedan ser totalmente cristalinas", dijo Salas.
El segundo Vicepresidente de la República, Ricardo Márquez, dijo que "si el Congreso lo acepta, yo asumiré la Presidencia".
El Presidente interino confirmó la dimisión del gabinete, ratificó el cronograma electoral y anunció que "haremos un gabinete de consenso, cuando se retiren algunos ministros".
Se sabe que el 7 de diciembre es una fecha clave para que se retiren de sus cargos en la administración pública todos aquellos que deseen participar del proceso electoral y los comicios de abril del próximo año.
Los parlamentarios de la oposición peruana acordaron pedir la renuncia de Ricardo Márquez a la Presidencia interina, favoreciendo así que la jefatura de Estado sea asumida por el Presidente del Congreso, Valentín Paniagua.
La continuidad del Presidente interino ha sido cuestionada por la oposición, que mantiene que éste fue parte del presunto fraude que se realizó para que Fujimori fuera reelegido por tercera vez consecutiva el pasado 28 de mayo.
Por su parte, los parlamentarios oficialistas declararon su apoyo a Ricardo Márquez para que reemplace al dimitido Alberto Fujimori.
Márquez afirmó anoche que no dimitirá porque eso sería "admitir" que ha estado "involucrado en actos de corrupción".
La incertidumbre acerca de quién sucederá a Fujimori en el mando y si se instalará un gobierno de transición, se mezcló ayer con las críticas a la forma en que Fujimori dio a conocer su dimisión: desde el extranjero, sin dar la cara y sin mayores explicaciones.
Esto provocó la renuncia irrevocable de los ministros del gabinete, quienes emitieron un comunicado manifestando su "indignación por tan sorpresivo hecho, en un contexto de grave crisis e incertidumbre respecto del retorno de Fujimori". El propio Ricardo Márquez dijo no estar de acuerdo con la manera en que se condujo el Mandatario, y le exhortó a regresar de Japón y a cumplir con "el deber moral" de "responder ante el pueblo peruano".
Los ministros confirmaron su disposición de seguir en sus cargos "hasta que se produzca la transición a un nuevo gobierno".
Crisis de Estado Los llamados a conservar la calma y a asumir con responsabilidad las horas cruciales que se viven provinieron ayer de todos los sectores políticos y sociales.
"Tenemos una obligación moral y política de asegurarle a nuestro pueblo una salida que, siendo constitucional sea, al mismo tiempo, identificada con las aspiraciones democráticas que animan a todos los sectores de la nación", dijo el Presidente del Congreso, Valentín Paniagua.
Consultado acerca de la validez de la renuncia de Fujimori, Paniagua explicó que debe formalizarse a través de un documento en el que éste exponga las razones que lo llevaron a tomar tal decisión.
"El Congreso deberá ponderar las razones de la renuncia y ver si éstas proceden", dijo Paniagua, sin referirse a si existe la posibilidad de que el Parlamento no acepte la renuncia de Fujimori, sino que decida decretar la vacancia de la Presidencia de la República por incapacidad moral del Mandatario, tema que se venía sugiriendo con insistencia en las últimas semanas y que es una gestión que le compete exclusivamente al Poder Legislativo.
Con respecto al supuesto vacío de poder que provoca la inminente renuncia del Mandatario y la dimisión no aceptada formalmente del primer Vicepresidente de la República, Francisco Tudela, Paniagua dijo que ha de prevalecer la línea de sucesión constitucional.
"Al producirse esta renuncia, se halla el segundo Vicepresidente en el ejercicio de la Presidencia, por lo tanto no hay un vacío de poder, desde el punto de vista legal", dijo Paniagua.
El Defensor del Pueblo, Jorge Santistevan de Noriega, sostuvo, en cambio, que la renuncia de Tudela nunca fue tramitada por el Congreso, de modo que podría ser él quien sea designado para asumir.
"Va a haber una lucha muy fuerte por el poder por parte de toda la clase política", vaticinó ayer la congresista oficialista Carmen Lozada, quien consideró que "esto es lo mejor que puede hacer el Presidente ante la posibilidad de que la oposición quiera decretar la vacancia de la Presidencia".
Los analistas consideraron que, si bien es cierto que la renuncia del Jefe de Estado constituye una crisis de Estado, las recientemente promulgadas reformas a la ley electoral y la convocatoria a nuevas elecciones presentan un panorama claro al que ha de ceñirse cualquiera que asuma la Presidencia en proceso de transición.
Fujimori en Tokio Alberto Fujimori salió intempestivamente el lunes de Perú con destino a Brunei, donde se realizó la cumbre presidencial de países miembros de la APEC (Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico), que se realizó el miércoles y el jueves de la semana pasada.
El mismo día de su salida, en el Parlamento fue destituida la Presidenta del Congreso, Martha Hildebrandt, con lo que el oficialismo perdió el control ininterrumpido que había tenido sobre el Legislativo durante diez años.
Después de Brunei, el Presidente debía dirigirse a Panamá, para asistir el viernes y sábado a la X Cumbre Iberoamericana. Pero ya la noche del miércoles, Fujimori salió de Brunei con destino desconocido. Finalmente el jueves por la mañana se confirmó que estaba en Tokio.
Desde entonces, otra serie de rumores confundió a la opinión pública: que Fujimori iba a pedir asilo político en Malasia; que había ido a Japón a visitar a su hijo; que estaba negociando un préstamo en Tokio para equilibrar la Caja Fiscal; que estaba enfermo y no podía viajar. Hasta que finalmente ayer, se supo oficialmente que renunciaba a la Presidencia de la República.
El Presidente interino Márquez dijo ayer que había prolongado su estadía hasta el miércoles 22, pero que no sabía con certeza si regresaría entonces.
En Tokio se informó que el Presidente Alberto Fujimori no ha solicitado asilo en Japón.
Funcionarios de la cancillería, hablando a condición de anonimato, negaron rumores de que Fujimori había solicitado asilo.
Entretanto, un funcionario del Ministerio de Justicia, Kazujiro Nakamura, negó versiones de que el Mandatario peruano es ciudadano japonés, y añadió que Japón y Perú no tienen un tratado de extradición.
La Cancillería se negó a revelar por cuánto tiempo Fujimori se va a quedar en Japón, aunque dijo que la visa del Presidente peruano es por un año.
En Lima ayer campeaban las especulaciones referidas a que Fujimori no regresaría a su país ante el temor de enfrentar denuncias de complicidad con Vladimiro Montesinos, su ex asesor de inteligencia y protagonista del mayor escándalo de corrupción en Perú.
Por su parte, el líder opositor, Alejandro Toledo, declaró anoche desde España a la cadena televisiva CNN que Fujimori ha solicitado a las autoridades japonesas un pasaporte de ese país.
Múltiples Reacciones En tanto, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas peruanas expresó ayer mediante un comunicado su "absoluta" subordinación al orden constitucional al conocer la dimisión de Fujimori.
"Las FF.AA. en cumplimiento a nuestro ordenamiento legal y subordinación al poder constitucional reitera su absoluto respeto a las decisiones que adoptarían las autoridades legítimamente constituidas en el marco de lo prescrito en la Constitución Política del Perú", señaló el escueto comunicado.
El ex candidato presidencial Alejandro Toledo dijo que la renuncia de Fujimori "es un triunfo de todos los que exigieron su salida". Toledo se mostró tranquilo de que exista un cronograma electoral establecido, y anunció su retorno desde Europa a Lima para hoy por la tarde.
El congresista oficialista, Absalón Vásquez, expresó su consternación por la renuncia del Presidente Fujimori y destacó la actitud del Mandatario que "es a fin de no generar más enfrentamientos propiciados por la oposición política".
Agregó que ayer se comunicó por teléfono con Fujimori, quien le dijo que ha decidido presentar su renuncia "por el bien del país".
El líder del Frente Independiente Moralizador (FIM), Fernando Olivera, consideró como una "gran noticia" para todos los peruanos la renuncia del Mandatario luego de 65 días de presentado el video de la corrupción en el que se observa al ex asesor del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN), Vladimiro Montesinos, entregando dinero al congresista Alberto Kouri.
"Para nosotros la renuncia de Fujimori en esta circunstancia no hace sino confirmar su responsabilidad dentro de lo que ha sido un manejo mafioso en el Perú en los últimos 10 años", señaló Olivera.
Desde Washington la portavoz de la Casa Blanca, Mary Ellen Countryman, indicó que EE.UU. trabajará con la Organización de Estados Americanos (OEA) para lograr una transición pacífica en Perú.
"Lo importante para Perú es que la transición en las elecciones del 8 de abril próximo se lleve a cabo de una forma fácil y pacífica", señaló la portavoz.
En junio pasado, la Asamblea General de la OEA envió una misión a Perú para colaborar en el restablecimiento de la democracia en ese país, encabezada por el secretario general de esa entidad regional, César Gaviria.
El propio Gaviria pidió ayer al pueblo peruano mantener la calma, permanecer vigilante y manifestar su respaldo a las instituciones democráticas y al orden constitucional.
Manifestaciones Populares La noticia de la renuncia del Mandatario peruano dio pie a que varios grupos de manifestantes salieran a las calles en varias ciudades del país para festejar y lanzar lemas contra el gobierno.
En Lima, unos cien trabajadores de la empresa Telefónica del Perú se reunieron en la Plaza Mayor de Lima para festejar la renuncia de Fujimori.
"Y ya cayó, y ya cayó, la dictadura ya cayó", cantaban los trabajadores que pedían la cárcel para los "siameses": el Presidente Fujimori y su ex asesor Vladimiro Montesinos.
En las plazas principales de las ciudades sureñas de Arequipa, Cusco y Tacna, en la norteña Cajamarca y en la de Iquitos (selva) grupos de pobladores manifestaron su alegría por la decisión del presidente Fujimori de retirarse del cargo.