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IndustriALL presenta demanda contra Roy Robson por continua represión antisindical

24 abril, 2018La marca alemana de prendas de vestir Roy Robson ha intensificado sus ataques contra Teksif, organización afiliada a IndustriALL, en su fábrica en Esmirna, Turquía. Esta represión se realiza a pesar de la intensa campaña mundial contra las políticas antisindicales del sector patronal. IndustriALL ha presentado una queja contra la empresa a la Asociación Alemana en favor de la Industria Textil Sostenible por violación de los Convenios 87 y 98 de la OIT.

El 18 de abril, la compañía despidió a Eser Yılmaz, tras otros 12 despidos de sindicalistas este año. Eser se afilió a Teksif en enero y era miembro activo del sindicato. Desde que se incorporó al sindicato, ha sido sometida a enorme presión; la llamaron a responder por su supuesto "bajo rendimiento", luego la empresa rescindió su contrato.

Esto se produjo tras el despido, en enero de 2018, de once miembros de Teksif que trabajaban en la fábrica en Esmirna. Valter Sanches, Secretario General de IndustriALL, escribió a la empresa para exigir la reincorporación de estos trabajadores/as. IndustriALL también solicitó una reunión con la empresa.

Cuando la empresa se negó a hacerlo, IndustriALL lanzó una campaña en LabourStart. Hasta la fecha, casi 8.000 personas han escrito a la compañía, exigiendo que respete los derechos laborales.

Roy Robson es miembro de la mencionada Asociación en favor de la Industria Textil Sostenible,  Bündnis für nachhaltige Textilien, que tiene como objetivo mejorar las condiciones sociales, ecológicas y económicas en las cadenas de suministro. IndustriALL presentó una queja ante esta asociación, con copia al Ministerio Federal de Cooperación y Desarrollo Económicos.

La denuncia señala que Roy Robson despidió a personal por su actividad sindical; con estos despidos se violan los convenios de la OIT, la legislación laboral turca, el código de conducta de la compañía misma y su plan de trabajo como miembro de la asociación industrial.

Mustafa Perçin, Secretario Internacional de Teksif, hablando en Ginebra el 23 de abril, señaló:

“Pedimos a las empresas de Roy Robson en Turquía respetar los derechos fundamentales de los trabajadores y trabajadoras, y pedimos a todos demostrar su solidaridad internacional”.

Por su lado, Kemal Özkan, Secretario General Adjunto de IndustriALL, afirmó:

“No cabe duda que Roy Robson está aplicando políticas destinadas a destruir al sindicato. Vamos a obligar a la empresa a rendir cuentas. Los trabajadores y trabajadoras tienen derecho a afiliarse a un sindicato, y seguiremos apoyando a nuestro afiliado Teksif”.

Los trabajadores y trabajadoras quieren tener un sindicato para resolver los problemas que enfrentan, que incluyen salarios muy bajos y control del tiempo que pasan en ir al baño. Si un trabajador/a pasa más de un minuto en el baño, le quitan dinero de su sueldo, lo que los trabajadores/as consideran humillante.

La empresa afirma que las decisiones sobre la fuerza de trabajo las toma la empresa turca en el lugar de trabajo, basándose exclusivamente en las necesidades del proceso de producción, y que la empresa no tiene idea de si el personal es miembro del sindicato o no.

Sin embargo, Roy Robson en Turquía no es una compañía separada, es de propiedad directa y ha participado explícitamente en la aplicación de represivas políticas antisindicales con el fin de contrarrestar la campaña de sindicalización. La compañía ha realizado reuniones largas e intimidantes en forma individual con los trabajadores/as, exhortándoles que no se afilien al sindicato. IndustriALL tiene grabaciones de audio y vídeo de estas reuniones antisindicales.

En Turquía, los sindicalistas tienen que informar al gobierno sobre su afiliación sindical, por vía de un sistema de registro en línea. En forma ilegal, la empresa obligó a los trabajadores/as a proporcionar sus contraseñas de "estado electrónico" para que pudiera identificar a los miembros de los sindicatos.

IndustriALL tiene los nombres de 13 trabajadores/as, entre ellos una mujer embarazada, que fueron despedidos por haberse afiliado al sindicato. El Código de Trabajo de Turquía No 4857 prohíbe despidos por actividad sindical, y el caso se está peleando actualmente en el tribunal laboral.