13 mayo, 2022El 19 de abril de 2022, más de veinte dirigentes y activistas del Congreso de Sindicatos Democráticos de Bielorrusia (BKDP) fueron detenidos por el Comité de Seguridad del Estado. Si bien algunos fueron puestos en libertad después, al menos diez siguen bajo custodia, entre ellos el presidente del BKDP, vicepresidente de la CSI y miembro del Consejo de Administración de la OIT, Aliaksandr Yarashuk, y el vicepresidente del BKDP, Siarhei Antusevich. Tanto ellos como sus compañeros son prisioneros de conciencia.
Enfrentados a cargos en virtud del artículo 342, parte 1, del Código Penal de la República de Bielorrusia, los sindicalistas fueron trasladados a prisión preventiva durante el transcurso de la investigación. Los cargos establecidos en el artículo 342 incluyen la organización de acciones que violan gravemente el orden público y se castigan con arresto, restricción de la libertad de dos a cinco años, o hasta cuatro años de prisión. Exigimos su liberación inmediata y la retirada de todos los cargos presentados por el régimen ilegítimo de Alexander Lukashenko, quien amañó una elección en 2020 para permanecer en el poder.
Tanto su detención como el tratamiento que han recibido provocaron indignación y protestas generalizadas. Se trata de un caso de motivación política relacionado directamente con sus actividades sindicales, así como un ataque a la democracia y al sindicalismo independiente, que es uno de sus componentes principales.
Toda detención, por breve que sea, de dirigentes sindicales por ejercer su legítimo derecho a la libertad sindical constituye una grave violación de los derechos humanos fundamentales, reflejada por el hecho de que el director general de la OIT, Guy Ryder, emitiera un comunicado especial y se dirigiera directamente al gobierno bielorruso. Utilizaremos la próxima Conferencia Internacional del Trabajo y el subsiguiente Consejo de Administración de la OIT para aumentar la presión sobre el régimen ilegítimo de Bielorrusia.
La comunicación con nuestros compañeros sindicalistas encarcelados solo es posible a través de abogados y cartas: exigimos el derecho a visitarlos en persona y estamos tratando de enviar una delegación de solidaridad a Bielorrusia a tal efecto.
Como federaciones sindicales internacionales, no nos quedaremos callados ante este ataque injustificado e inaceptable contra los sindicatos bielorrusos y, por extensión, contra los trabajadores y los sindicatos de todo el mundo: atacar a uno es atacarnos a todos.
Declaración del Consejo Global Unions (CGU) del 13 de mayo de 2022.